Post 4 técnicas para aprovechar mejor el tiempo

Si has leído nuestros otros  post como enlace y enlace este te va a completar lo que necesitas para ser tu mejor versión respecto a gestión del tiempo y a tu productividad.

He recopilado 4 técnicas o si prefieres estrategias para que las pruebes y elijas la que mejor te funcione… y si no quieres elegir pues ¡quédate con todas!

La técnica Pomodoro

Mi favorita y la que, de hecho.. Esta técnica fue inventada por Francesco Cirillo, ingeniero informático que hoy tiene una consultora que ayuda a empresas e individuos a alcanzar el máximo de su productividad.

El nombre de la técnica se eligió por los temporizadores de cocina con forma de tomate (en italiano, pomodoro) que eran muy famosos en los años ochenta. Y la idea principal de esta técnica es que trabajes muy concentrado durante un periodo de tiempo viable, en el que tu cuerpo y tu mente no se cansen. En medio de descansos, puedes alcanzar una jornada de trabajo completa y productiva.

El método para aprovechar la técnica Pomodoro es muy sencillo y solo requiere de cuatro pasos:

1.  Haz una lista de tareas prioritarias para el día .Esta lista debe ser realista y además, debe ajustarse a las horas que te has marcado para trabajar. Empieza por lo más difícil o lo más importante, en términos de productividad algunos lo definen como “comerse el sapo primero” (eat the frog first), es decir, que acabes la tarea que más te cuesta antes, para que estés más relajada en las tareas siguientes.
   

2. Programa un temporizador  veinticinco minutos. Puedes usar un temporizador analógico o uno digital.
   

3. Trabaja en la tarea hasta que esos veinticinco minutos terminen. Esos veinticinco minutos equivalen a un pomodoro.
   

4. Haz una pausa de 5 minutos entre cada pomodoro. Una vez que hayas acumulado 4 pomodoros, haz una pausa de 10 o 15 minutos. Estas pausas úsalas para mover el cuerpo.
   

Mientras un pomodoro esté corriendo, concéntrate solo en una tarea, si surgen cosas en medio, anótalas para después. Si no puedes evitar hacer caso a las interrupciones, el pomodoro se tiene que reiniciar de cero.

Con el tiempo, el cerebro se va haciendo con el  hábito de concentrarse sin problemas durante veinticinco intensos minutos, pues en realidad no son periodos muy largos como para agotarse, y a la vez, es un tiempo ideal para trabajar en una tarea y completarla.

Esta es mi técnica favorita porque el temporizador me ayuda a concentrarme, y veinticinco minutos me parecen el tiempo ideal para hacer algo y completar cosas sin cansarme demasiado. Gran parte de tu jornada laboral puede partirse en pomodoros, así que inténtalo.

Completa entre tres y cuatro tareas importantes por día.

Muchas de nosotras cometemos el error de elegir más de tres o cuatro objetivos por día. Echa un vistazo a tu última lista de tareas, ¿cuántas hay? elegir más de ese número es demasiado. Los días son lo suficientemente largos como para hacer maravillas, pero querer abarcar de más solo te va a producir estrés y ansiedad. Hacer pequeños progresos diarios será mucho más satisfactorio y productivo. Mientras los objetivos que te plantees al día te acerquen poco a poco a la meta que quieres alcanzar a fin de mes, o a fin de año, entonces estarás avanzando en la dirección correcta.

Crea un ritual en las mañanas

La forma en la que te levantas y afrontas la mañana puede cambiar de forma radical todo tu día, incluso cómo duermes por la noche. Tener un ritual te puede ayudar a darle forma a todo lo que vas a hacer. En primer lugar, necesitas empezar a despertarte siempre a la misma hora, no importa a qué hora te hayas dormir. Tú elige la hora más adecuada.

Una vez que hayas decidido la hora, tienes que deshacerte de malos hábitos al despertar, es decir, no vayas a coger el teléfono  de inmediato. Estírate y medita, date  una ducha  –si eso te ayuda a empezar bien el día, a mí me funciona más una ducha para acabar mi día– y luego toma una taza de café o té mientras lees noticias relevantes, escribes en tu diario, repasas tus objetivos del día o simplemente te relajas y te preparas.

La mañana debe ser un momento para que conectes contigo misma. Tener esta rutina te ayudará a energetizarte y estar preparada, sentirás que ya empezaste a ser productiva.

Para que esta rutina sea efectiva, hay algunas cosas que debes hacer antes de acostarte, como hacer tu lista de tareas inaplazables y elegir qué ropa te vas a poner.

Apila tareas parecidas en bloques (Batching de tareas)

Según tu tipo de trabajo, te encontrarás con que algunas tareas son muy parecidas entre sí. Al momento de organizar tu día, puedes organizar  tus tareas de modo que las que se parezcan más, las hagas en el mismo periodo de tiempo. Por ejemplo, puedes ocuparte de toda la parte financiera (revisar bancos, pagar recibos pendientes, revisar tu presupuesto) primero; luego puedes ocuparte de las redes sociales de tu negocio, después puedes apilar responder a todos tus WhatsApps y correos electrónicos pendientes.

De este modo, tu mente se mantendrá enfocada en tareas parecidas y no perderás el control ni la concentración saltando entre tareas muy diferentes entre si. Esto te permitirá completar esas tareas más rápido, porque nuestro cerebro se acostumbra y empieza a actuar un poco más mecánico y eficiente.

Asigna tiempo para cuidar de ti

La productividad está directamente relacionada con la forma en que nos sentimos. No cuidar nuestras necesidades básicas y subestimar el tiempo que tenemos asignado para nosotras, nos puede llevar a niveles bajos de productividad. Una buena noche de sueño, ejercicio diario, estirarte y tomar descansos es tan necesario como tener una lista de objetivos. Asigna tiempo todos los días para cuidar de ti a conciencia, es indispensable que tu cerebro descanse y que te sientas bien.

Cuidar de ti también incluye tener una dieta saludable y estar bien hidratada. ¿Has notado que a veces te da sueño de la nada y no sabes por qué?, ¿o de pronto comienzas a sentir un dolor de cabeza punzante y constante? algunas veces esto es resultado de la deshidratación, y de que somos negligentes con nuestros hábitos saludables por estar pensando en trabajo todo el día. Come suficiente (no demasiado, porque podría darte sueño y ser contraproducente) y toma suficiente agua durante todo el día. No podemos esperar que nuestro cuerpo funcione bien si no lo tratamos bien.

Esperamos que estos tips en forma de técnicas te ayuden mucho a aprovechar mejor tu tiempo y ser más productiva.

Nos encantará leerte y conocer tu experiencia.

Un abrazo